miércoles, 28 de octubre de 2009

Periodismo de Opinion


El dinero no es felicidad,

pero te aproxima Ella

La pobreza no es el fin de la vida humana,

pero conduce a EL-Lo…

La Universidad Mariana en los días 15 y 16 de octubre llevo a cabo “El Primer Congreso Internacional de Investigación Científica” con el lema “El Compromiso de la Educación Superior en la Erradicación de la Pobreza y el Hambre”.
Con el objetivo de promover espacios de interacción e intercambio de conocimiento, divulgación, transferencia y apropiación de los resultados de investigación, que conduzcan a generar alianzas estratégicas y alternativas para aumentar los impactos de las políticas públicas para la erradicación de la pobreza extrema, el hambre y la desnutrición crónica infantil en la Región.

Por tanto, se creo un punto de encuentro, donde entre otras temáticas, la pobreza fue expuesta en todo el sentido de la palabra. Pues, usualmente se relaciona pobreza con la falta de dinero o con la escasez material. Así, Luz Marina Lurduy docente universitaria del Minuto de Dios en su ponencia “Mujer y su Aporte a la Superación de la Pobreza y el Hambre” habló desde una perspectiva de Género, es decir, de una Superación de Desigualdades Sociales, de no Exclusión, Discriminación, Inclusión, Equidad, Oportunidades, Garantías (Salud, Educación, Vivienda…)

Al respecto, se puede decir que en un artículo presentado en la revista “Equinoccio” por parte de Graciela Sánchez Narváez, titulado “Presencia de la mujer en el periodismo regional” donde se hace una reseña histórica de la participación femenina en artículos de periódicos regionales, se concluye “No se encuentran sino las evidencias aisladas de artículos escritos por mujeres residentes en Pasto, en periódicos como El Poder, El Derecho, El Semanario Nariño al Día, Diario del Sur y algunos periódicos escolares… Pareciera que estos espacios también desaparecen en el tiempo disminuyendo ostensiblemente las oportunidades de intervenir en estos medios”.1

En este sentido cabe mencionar el informe presentado por el Director General de la OIT (Organización Internacional del Trabajo) donde se señala que las diversas formas de discriminación de género– están fuertemente asociadas a los fenómenos de exclusión social que originan la pobreza y son responsables por la superposición de diversos tipos de vulnerabilidad…2

De igual manera, la docente hablo de una “Pobreza Heterogénea” donde la misma se da de diferente manera en el hombre que en la mujer. Ejemplificando y diferenciando la pobreza de una mujer negra en el Choco que en Bogotá. Dado que esta diferencia según Luz Marina “Se debe a que tanto hombres como mujeres han venido desempeñando diferentes roles, posiciones en la sociedad. Los hombres han accedido al mercado laboral y los servicios sociales más rápido, que las mujeres, ellos han manejado con autonomía sus ingresos, han tenido mayores oportunidades de capacitación y formación… Lo cual de muestra que ya hay un acumulado en los hombres”.

De hecho, hay más mujeres que hombres en situación de pobreza, en un porcentaje que varía de 3% a 35% en los países latinoamericanos.

“En las mujeres superar la pobreza implica: superar su rol domestico, superar la pobreza de la familia, superar la falta de oportunidades educativas, laborales y de previsión en salud” manifestó la docente universitaria.
Complementándose con el concepto de Lila García “Las mujeres pobres tienen menos probabilidades de recibir educación y atención prenatal, sus hijos tienen menos probabilidades de sobrevivir al nacer y de completar la escolaridad, todo lo cual perpetúa el ciclo de privaciones transmitidas de una generación a otra” 3

Del mismo modo, la globalización ha conducido a una modernización de la sociedad, la cual ha llevado a una serie de cambios en la estructura social, económica, política, cultural… Que inciden de una u otra manera en la familia, ejemplo de ello es el cambio de rol en la mujer, donde ella ya no es la madre de familia, el ama de casa o la señora del hogar, si no la “madre cabeza de familia”. Que en palabras de la docente Lurduy significa “Encontramos a una mujer trabajadora en el plano domestico y en su trabajo remunerado informal. El hombre que ya no tiene las mismas ofertas laborales precisamente por la inestabilidad del mercado laboral, se queda en casa, pero aunque se quede en ella, no desempeña las funciones que hace la mujer, pues es ella quien deja haciendo el almuerzo, llega a la lavar a planchar…”

Respecto al manejo de la Equidad de Género por parte de los medios, Luz Marina expreso “Se debe utilizar un lenguaje no sexista, un lenguaje que recupere la autonomía y valore a la mujer de una manera distinta, que la nombre, que ponga en evidencia lo que hacen las mujeres, cambiando la mirada de la mujer como objeto, seductora, criadora de hijos, para mostrarla en otra dimensión menos costumbrista o monótona. A través de mensajes, campañas, análisis de noticias, donde el papel de la mujer se vea valorado y destacado.”
Adicionándole que la Cumbre Social de Copenhague (1995) y la Cumbre del Milenio también enfatizan la necesidad de “Promover la igualdad de género y el empoderamiento de la mujer como el camino efectivo para combatir la pobreza, el hambre y las enfermedades y estimular un desarrollo realmente sustentable” (Párrafo 20 de la Declaración del Milenio). 4

Así, este espacio de información y socialización condujo a mirar desde otra perspectiva el tema de la pobreza, a hacer el llamado a una acción integral de alternativas de solución, que lleven al replanteamiento de políticas de equidad y de género. Por tanto, lo anterior no significa que el texto sea feminista, pero si reciproco a un concepto de igualdad. Tal vez, el hecho no está en mostrar al género femenino como victimas de una sociedad, si se quiere machista, pero si promover el trabajo o gestión de ir modificando la forma de pensar, para actuar en la transformación de aquel entorno de desigualdad. Tampoco se trata de mostrar al hombre como el causante del mal de esta disconformidad, ya que la mujer debe participar de forma activa en la toma de decisiones, de cualquier índole, conociendo y exigiendo sus derechos y si es necesario denunciando la falta de los mismos. En pocas palabras, es un llamado a leer la realidad femenina, para escribir con hechos la justicia de lo humano.

LlaNo - s


1. SÁNCHEZ NARVÁEZ, Graciela.” Presencia de la mujer en el periodismo regional” En: Revista “Equinoccio”. Pasto, Agosto-Septiembre de 2008, pág.17-18
2.4. VALENZUELA, María Elena. “Desigualdades entrecruzadas Pobreza, género, etnia y raza en América Latina”
3. GARCÍA Lila. “DE LOS DERECHOS A LAS POLÍTICAS. EL ENFOQUE DE LOS DERECHOS HUMANOS EN LA DEFINICIÓN DE LAS POLÍTICAS FRENTE A LA POBREZA”