miércoles, 4 de marzo de 2009

Lo Mejor del Periodismo Colombiano

Jaime y el periodismo no se tienen que acallar
Jaime Garzón manejaba el humor, la denuncia y la ironía como una herramienta periodística en pro de la verdad, que a muchos y a él mismo “mato”de la impresión.
El 13 de agosto de 1999 cuando Jaime se dirigía a su programa en la emisora Radionet a las 5:30 de la mañana, fue asaltado en su camioneta por un par de sicarios que le propiciaron cinco tiros en la cabeza. Ya que este periodista había sido declarado blanco militar por Carlos Castaño, jefe de las Autodefensas. Paramilitar que más tarde fue sindicado como el autor intelectual del homicidio, condenado a 38 años de prisión. Condena que tal vez será pagada por Castaño en el infierno o purgatorio, pues se dice que fue asesinado por su propio hermano Vicente. Y ni que hablar de los supuestos sicarios Juan Pablo Ortiz Agudelo “bochas” y Edilberto Antonio Sierra Ayala “toño” quienes fueron absueltos por falta de pruebas en diciembre de 2003.
Manifiestan entendidos en el tema que el móvil del asesinato habría sido la participación de Garzón en unas negociaciones destinadas a conseguir la liberación de personas secuestradas por la guerrilla de las FARC. Puesto que Carlos Castaño acusaba al periodista de estar haciendo el juego a la guerrilla y también por haber recibido dinero a cambio de sus servicios. Pero otras versiones señalan que el caso implicaría a militares, ya que ellos temían las revelaciones del periodista sobre su presunta implicación en el tráfico de armas y personas secuestradas con la guerrilla de las FARC. Otras que el DAS desvió las investigaciones tanto en Bogotá como en Antioquia con la eliminación de llamadas de alerta y manipulación de pruebas. Y otras que resumen o afirman que el Estado es el responsable al manifestar que los organismos de seguridad sabían del peligro que corría el periodista por las amenazas recibidas.
En fin, una serie de presuntos responsables que a la final nadie ha sido condenado, en un proceso judicial en el que hoy en día, como Jaime se ha visto eliminado y olvidado. Igual al caso del también Periodista Orlando Sierra Hernández, subdirector del “Diario la Patria” quien fue acallado por dos disparos el 30 de enero de 2002, por Luis Fernando Soto Zapata. Un sicario que fue condenado a pagar 29 años de prisión, en una pena que se redujo a 5 años y 8 meses, “gracias” a algunos beneficios “por confesión, buena conducta y trabajo”
Por ello cabe decir que la impunidad, el olvido y la falta de presión reinan en estos procesos, pues los autores materiales e intelectuales están libres. El tema sólo es tocado cada 13 de agosto o 30 de enero… Por tanto, que hoy la prioridad son las investigaciones en los mismos entes de orden o justicia (Fiscalía – DAS: Intercepción de llamadas. Militares: Falsos positivos)
De tal manera que los homenajes, discursos, manifestaciones… Se tienen que hacer presionando a la Fiscalía, en pro del esclarecimiento de la muerte de estos dos y más periodistas y buscando todos los días cristalizar ante el Estado la verdadera protección y respaldo a un periodismo público – social que habla con la verdad.
Jhon Mueses

1 comentario:

Héctor dijo...

Recuerda, por favor, comentar el trabajo periodístico que permitió evidenciar la impunidad frente al asesinato de Jaime Garzón.